Las ardillas viven solas o en grupos en su nidos y pasan la mayor parte del día buscando comida. Exceptuando una pequeña siesta por la mañana, las ardillas se pasan todo el día buscando hojas, hierba, ramas y otros objetos para construir su nido, así como frutos secos y semillas para alimentarse. Con su aguda visión y sus bigotes, estos roedores están siempre atentos ante el posible ataque de sus depredadores, especialmente los felinos. Debido a que las ardillas esconden sus provisiones para el invierno en distintos sitios, algunas veces se olvidan del lugar en el que tenían guardada la comida. La alimentación de las ardillas varía según la estación del año. Entre otros comen insectos y orugas.

Viviendo en grupos, los ciervos jovenes reciben mucho cuidado y están bien protegidos, especialmente en los bosques por su camuflaje con lunares blancos en su espalda. Tienen patas largas que le ayudan a huir de los depredadores. Los ciervos son los únicos mamíferos que llegan a tener cuernos. Los machos los utilizan para competir con otros machos durante el período de apareamiento. Además, durante esta época, los ciervos rojos machos desarrollan una melena al rededor de su cuello que es de un espeso pelaje, y sirve para que el macho rojo tenga una apariencia aun más intimidante. Estos ciervos pueden vivir durante diez o veinte años, dependiendo de si viven en cautivero o en libertad.

Los saimiris son una especie de pequeños primates que se extienden por los bosques de la cuenca del Amazonas. Se conocen como “monos calavera” en algunos países por el dibujo en forma de máscara del pelaje de su cara y por su hocico negro. Su cuerpo está cubierto por un pelo corto y espeso, cuyo color varía del gris al verde. Sus manos suelen ser de color amarillo anaranjado, mientras que la barriga es blanca por lo general. Los saimiris son unos escaladores muy ágiles gracias a su larga cola y se alimentan preferentemente de insectos y fruta. Una manada de saimiris puede abarcar hasta cien animales liderados por la hembra de mayor rango.

Los zorros voladores son una especie de mamíferos que parecen murciélagos gigantes. A pesar de su enorme envergadura de hasta 1,70 metros, estos animales son totalmente inofensivos. Su alimentación es exclusivamente vegetariana. Además del tamaño hay otras diferencias con respecto a los murciélagos, con los que están emparentados. Así pues, por ejemplo, la mayoría de las especies de zorros voladores no dispone de ecolocación. Eso sí, tienen un sentido de la vista muy bien desarrollado y un olfato excelente.

Viviendo en grupos, los ciervos jovenes reciben mucho cuidado y están bien protegidos, especialmente en los bosques por su camuflaje con lunares blancos en su espalda. Tienen patas largas que le ayudan a huir de los depredadores. Los ciervos son los únicos mamíferos que llegan a tener cuernos. Los machos los utilizan para competir con otros machos durante el período de apareamiento. Además, durante esta época, los ciervos rojos machos desarrollan una melena al rededor de su cuello que es de un espeso pelaje, y sirve para que el macho rojo tenga una apariencia aun más intimidante. Estos ciervos pueden vivir durante diez o veinte años, dependiendo de si viven en cautivero o en libertad.

Esta 'águila de mar', el ave nacional de los Estados Unidos de América, se puede encontrar cerca de aguas abiertas, en una zona con abundante existencia de alimentos y en bosques vírgenes. Su fuente de alimento más importante es el pescado y prefiere anidar en árboles altos y adultos. Esta ave de gran tamaño puede tener 1 metro de largo, una envergadura de dos metros y medio y alcanzar un peso de siete kilos. Curiosamente, las hembras tienden a ser significativamente más grandes que los machos. Viviendo por lo general una veintena de años o más, las águilas pueden migrar si su fuente de agua se congela. Uniéndose en parejas de por vida, estas aves comparten el trabajo de criar a los polluelos.